La cílix y el tresoret vuelven a Castelló con un balance de más de 22.000 visitas

08/06/2023

Las piezas más emblemáticas del patrimonio arqueológico benicarlando se han podido visitar durante 7 meses en el Mucbe, en el marco de la muestra ‘Terra d'ibers'. Ahora vuelven al Museu de Belles Arts de Castelló, donde forman parte de su exposición permanente.

La cílix y el tresoret han abandonado hoy el Mucbe después de siete meses expuestos al público en el marco de la muestra permanente del Mucbe 'Terra d'ibers', una exposición que, de forma atractiva y pedagógica, pone en valor la historia de los primeros pobladores de Benicarló y permite a los visitantes entender mejor como vivían los iberos o cómo se organizaban socialmente.

A lo largo de estos siete meses, las dos piezas más emblemáticas del patrimonio arqueológico benicarlando han recibido la visita de 22.260 personas, una cifra que muestra el interés que ha despertado su presencia en Benicarló, gracias a la cesión temporal de la Dirección General de Cultura y Patrimonio.

Las piezas, datadas del siglo V aC, fueron encontradas en las primeras excavaciones arqueológicas que se organizaron en el poblado ibero del Puig de la Nau (la cílix en 1975 y el tresoret en 1998) y, dado que en aquel momento Benicarló no disponía de un museo para catalogar y conservar los hallazgos, se trasladaron a Castelló. Actualmente pertenecen al Museu de Belles Artes de Castelló, donde forman parte de su exposición permanente.

Durante los siete meses que han sido expuestas en Benicarló, el Mucbe ha organizado visitas guiadas, y talleres escolares y didácticos para darlas a conocer y ponerlas el valor. De hecho, de las más de 22.000 visitas, casi un tercio se corresponde con grupos escolares.

La cílix, atribuida al pintor de Penthesilea, es una copa de producción griega que contiene en el interior un medallón central con una pareja, mientras que en el exterior se pueden ver dos escenas con cinco figuras cada una.

Servía para beber vino de forma comunitaria y tenía, probablemente, una función de carácter ritual. Tiene un diámetro de 470 mm y una altura de 112 mm y está datada del siglo V aC.

En cuanto al llamado tresoret del Puig de la Nau, es un conjunto de piezas de joyería u ornamento personal que formaban parte de un depósito ritual: un pasador bicónico de oro, dos pares de pendientes y un brazalete abierto de plata. Las piezas, que pertenecían con toda probabilidad a una mujer del alta sociedad, fueron localizadas todas juntas en una de las paredes de las casas del poblado del Puig de la Nau y también están datadas del siglo V aC.